Casino Caracas. Envites y azares de la cultura urbana

La apuesta es alta para construir una agenda cultural de calidad para la ciudad. La comunidad que hace vida en el Ecosistema de Economías Culturales Casino Caracas a través de sus unidades productivas, ya desde finales del 2021 comenzaba a hacer ruido en los cuatro puntos cardinales de la ciudad a partir de las actividades realizadas en el inicio de una era postpandémica. Durante todo el 2022 Casino Caracas se convirtió en un lugar de encuentro y referencia principal de la cultura urbana caraqueña.

Conformado por una red de unidades productivas y autosostenibles, artistas y activistas urbanos emergentes, esta comunidad cultural funciona a partir de nuevas modalidades de trabajo y relaciones productivas asociadas a una población de distintos sectores de la ciudad que se despliega desde el sector en el que hace vida, la parroquia histórica La Candelaria.

El proyecto actualmente funciona desde la construcción permanente, involucrando a sus residentes y aliados en todo el proceso de rehabilitación física. Un modelo de intervención que incluye una agenda cultural semanal, con actividades de formación.

Este ecosistema cultural también se involucra con el tejido de la ciudad y busca una interconexión con el contexto de sus alrededores, conformado por urbanizaciones históricas del centro de Caracas, mercados, entidades públicas y edificios patrimoniales.

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El edificio que acoge este proyecto es una obra arquitectónica de mediados del siglo XX, que ha atravesado diferentes mutaciones tanto físicas como gerenciales. Es un edificio que pertenece al Estado venezolano, específicamente a la alcaldía del municipio Libertador. Durante sus primeros años funcionó como sede de oficinas administrativas del Gobierno de la ciudad. 

Con el paso del tiempo y cambios de gestiones gubernamentales el edificio fue cambiando de actividades, hasta que a principios de este siglo una pésima gestión de la Alcaldía entre 2000-2004 entregó la concesión del edificio a un casino. Afortunadamente, bajo un decreto presidencial del 2011, se prohibió el funcionamiento de los casinos, salas de bingo y máquinas traganíqueles en Venezuela (flexibilizado en el 2021). 

Ocho años después de convertirse en tierra de nadie, luego de su cierre como casino en 2011, tras el decreto presidencial, el edificio es concedido a un grupo de artistas, creadoras y creadores de distintas disciplinas y áreas del saber, con un primer impulso desde el Movimiento por la Paz y la Vida, y se funda en el 2019 el Ecosistema de Economías Culturales Casino Caracas.

Casino Pavilion

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Casino Pavilion es una unidad de investigación y desarrollo, un lugar donde se piensa y se debate la ciudad, está ubicado en el piso 7, con acceso a la terraza/azotea donde un miniramp espera a los patinadores y patinadoras de la ciudad. Casino Pavilion está conformado por un amplio corredor con una decoración híbrida entre lo industrial y el glamour de los casinos de los años cincuenta, donde reposa también una intervención titulada Balcón parásito, del arquitecto Marcos Coronel.

Durante el 2022 Casino Pavilion se convirtió en uno de los principales espacios de encuentro en Caracas para debatir la ciudad. El preludio a estos encuentros fue el 27 de diciembre del 2021, con un conversatorio junto al arquitecto Ricardo Sanz, premio Hábitat Sostenible de la XVI Bienal Internacional de Arquitectura de Buenos Aires, 2017.

Esta agenda de encuentros y conversatorios para pensar la ciudad continuó durante todo el 2022 con la participación de artistas plásticos, fotógrafos, músicos, DJ, críticos culturales y pensadores como Helena Carpio (periodista), Nanu Rodriguez (fotógrafa), Lusimar Torrealba, Martín Padrón, Ricardo Parra (músico y luthier), Gregory Vertullo (Proyecto restaurador del Hotel Humboldt), Félix Gerardi (fotógrafo), Reinaldo Mijares (bailarín), Alí Morales (creador de contenido), entre muchas y muchos otros.

A esta programación se incorpora el performance y la fiesta, con el Kiki Sky Ball de House of Fantasy, una pasarela vanguardista y futurista de modelaje. Microclub también llegó a Casino Pavilion con una propuesta que dialoga directamente con las pistas de baile de música electrónica del underground mundial, en una atmósfera de live performance, vinyl sets y música digital. Casino Pavilion se convierte en un templo de la escena electrónica caribeña.

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Queer y si ser, thats the Question

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“El mundo está cambiando; la música está cambiando; los estimulantes están cambiando; incluso los hombres y las mujeres están cambiando”, Mark Renton reflexionaba en medio de un trance en una discoteca de fin de siglo en el reino Unido, con los ojos fuera de órbita envuelto en el sonido de los subwoofers y los compases del más noventoso EDM (Electronic Dance Music) de finales del siglo XX. 

El personaje representado por Ewan McGregor en la película Trainspotting, de manera profética, se adelantaba y le tomaba el pulso a la sociedad del futuro con un leve error de cálculo de diez siglos, como vaticinó en su visión narcótica, en vez de un cuarto de siglo. 

A inicios de aquella misma década en 1990, la teórica y académica feminista Teresa de Laureti introdujo la expresión «teoría queer» en el campo epistemológico y los estudios de género. Esta teoría establece “la posibilidad de repensar las identidades desde fuera de los cuadros normativos de una sociedad que entiende el hecho sexual como constitutivo de una separación binaria de los seres humanos”.

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Caracas, como otras capitales de Latinoamérica y el mundo, representa un gran atraso en las agendas de género, tolerancia e inclusión; lamentablemente seguimos en un país en el que la discriminación se sigue camuflando detrás del humor y el “chalequeo”, reduciendo a gran parte de la sociedad venezolana a las reflexiones limitadas de un patio de recreo de los años ochenta y a las metáforas del “chinazo”.

Está Jevi se convirtió en un espacio de inclusión para nuevas generaciones, que ofrece una plataforma para que artistas emergentes y microempresas puedan difundir y vender su trabajo tras presentar sus propuestas. Desde una mirada femenina, Está Jevi es un espacio de tolerancia para la comunidad LGBTIQ+ donde pueden expresar con libertad su género y sexualidad.

Sus productoras, Coromoto Hernández y Camila Bonett, fueron construyendo este proyecto a partir de una investigación para una tesis de grado de la escuela de sociología de la UCV. Al momento de la redacción de este artículo cuentan con seis ediciones oficiales y con decenas de aliadas, aliados y participantes. A la primera edición fueron 100 personas, a la segunda 300, a la tercera 400 y a partir de la cuarta el público osciló entre las 500 y 900 personas.

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Está Jevi está compuesta de una pista de baile y un bazar, cada espacio con una pantalla, además de exposiciones fotográficas y de arte en general. El carácter diverso de esta fiesta se refleja en su público, donde se puede encontrar a la excandidata del Miss Venezuela y diseñadora de moda Marina Taylhardat bailando al lado del creador de contenido Alí Morales, un público diverso en todo sentido, en cuanto edades, clase social, género, raza, religión, espectro político y todos los rasgos que la sociedad conservadora se empeña en antagonizar. 

Cómo experiencia, conservo el recuerdo cuando perdí mi celular entre unas 500 personas en su última edición y su productora me dijo “tranquilo que aquí no se pierde nada”; yo, incrédulo me tomé una cerveza recién destapada fondo blanco y seguí bailando. En menos de una hora tenía mi celular de regreso, alguien se lo entregó en sus manos a Camila.

Atarraya

Es una fábrica de producción cultural y artística autogestionada, que hace parte del Ecosistema de Economías Culturales Casino CCS, donde se promueven y ofrecen actividades y servicios relacionados con las artes audiovisuales bajo tres ejes fundamentales: agitación, producción y formación.

Con la práctica artística y el uso de la tecnología, Atarraya propone la circulación de bienes y servicios de calidad que potencien el valor humano y la identidad local. Por hacer vida en un ecosistema urbano, Atarraya se inserta en el tejido socioproductivo y cadenas de valor cultural que propicien una práctica solidaria y sustentable de economía creativa en la ciudad de Caracas.

Trópico 70 archivo musical 

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Es un centro de investigación y documentación musical con un espacio físico, proyectado a cubrir la demanda de la comunidad de investigadores inmersos o al margen de instituciones académicas a través de procesos formativos, seminarios y talleres vinculados al ecosistema de la música local y global desde una perspectiva histórica, social y política, con fundamentos en el pensamiento crítico y la producción de nuevo conocimiento

Su trabajo está avalado por una larga trayectoria en el entorno cultural de la ciudad dentro de organizaciones independientes, oficiales y del sector privado. Así como también cuenta con el aval y alianzas con distintos gestores y organizaciones culturales internacionales de países como Argentina, Brasil, Inglaterra y otros países de Europa.

Su objetivo principal es la difusión de contenidos musicales a través de formatos físicos, digitales, hemerográficos y bibliográficos; en un espacio de libre consulta que permita la interacción presencial de los investigadores con los contenidos. Entre sus objetivos, destaca la intención de sostener una agenda periódica con actividades que, a mediano y largo plazo logre la sustentabilidad y aporte un espacio de información y por consecuencia una comunicación directa hacia el público en un espacio interactivo de arte, educación y formación cultural libre.

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Una agenda en expansión

En el 2023 la ruleta de Casino Caracas gira a toda velocidad, pero no al azar. En este Ecosistema de Economías Culturales todo es planificado a su justa medida, con una producción impecable y abierta a nuevas propuestas que sumen nuevas alianzas. Ya están publicadas las fechas de las dos fiestas residentes más esperadas de Caracas, Está Jevi el 17 de marzo y Microclub que tuvo su primera edición del año el 27 de enero.

Así mismo, durante la semana los procesos formativos y actividades deportivas siguen su ritmo desde inicios de enero, como el sistema libre de Karate Caracas para niños, jóvenes y adultos; clases de yoga, biodanza, encuentros y conversatorios de artes urbanas, fotografía, diseño y arquitectura. También cuenta con prestación de servicios como alquiler de espacios, sistema de sonido, producción de campo, producción audiovisual, carpintería, taller de orfebrería, el taller de bicicletas y los servicios de barbería y tatuajes de Gala Studio. Te esperamos para debatir y construir ciudad juntas y juntos en Casino Caracas.