I
Ayer una mujer parió un soldado,
Le dieron a ella dos morlacos.
Entendió ella el procedimiento, es sencillo.
Pudo poner pepinos en su feo guiso.
II
El hombre de la fabrica de hierro,
Trabajó el doble por el mismo sueldo.
Entendió el procedimiento, es sencillo.
Pudo beber agua ardiente, casi un medio litro.
III
El ladrón de frutas esta afligido, (Vende hortalizas en el barrio chino).
Todos lo conocen y no lo detienen.
Abrumado se siente por perder su prestigio.
No entiende el procedimiento, y es tan sencillo.
IV
El hijo del cuidador de perros, estudia de día y estudia de noche.
Sueña con América y en pasearse en un coche.
Entiende él mejor el procedimiento, mejor que su padre.
Abandona el estudio y se hace gendarme.
V
El tratante de blancas, que en el pasado boxeaba,
Pensó en “la mujer” y dejó las trompadas.
Consiguió rápidamente tener empleadas, que tenían terror al mirar su cara.
(El sí que entendió el procedimiento)
VI
El enfermo de artritis espera atenderse por tres moneditas.
Cree que su dolor le importa a la ciencia.
Espera sentado, ya que parado le duele, supone que su queja a alguien conmueve.
La salud gratuita ya no es bien vista, si no hay dinero ¡que forme la fila!
(Aquí el procedimiento cala los huesos).
VII
El joven pescador de camarones multiplica sus redes.
Pero el mar sus frutos no le devuelve.
Desde el carajo con su catalejo divisa a lo lejos seis grandes barcos.
Son factoría le explica su abuelo, también pobre, también marinero.
(El procedimiento requiere evolución, y progresos en los medios de producción).
VIII
La señora costurera no pensaba en ganancias.
Con su máquina, la tela y su habilidad, produjo un vestido para intercambiar.
¡Esta pasada de moda! le dijeron en el mercado (su mercantilismo está acabado).
Consígase usted costureros asalariados, en poco tiempo verá el resultado.
(Sus consejeros entendían muy bien el nuevo procedimiento)
IX
Al recolector de batatas le duele la espalda, y pide ayuda a quién lo contrata.
El capataz sugiere que escriba una carta, ya que su empleador no tiene cara.
El recolector de batatas es analfabeto, no reconoce su nombre en un cuaderno.
Le proponen entonces que se arrodille, que mire al cielo y a Dios le suplique.
(Existen muchas formas de asegurar la vida del procedimiento)
X
Al gendarme provincial que en el oscuro callejón vigila, de justicia le han hablado.
Ha recibido una breve instrucción, pero ahora ya está armado.
¿Por qué es tan pequeño mi salario? Se pregunta el oficial consternado.
Le responden «porque hay pobres buenos y porque hay pobres malos”.
(El conflicto entre iguales asegura el procedimiento).