Estimados lectores, estamos felices porque MenteKupa ya sabe contar hasta diez, reconocer rimas simples, abotonarse sola algunas prendas de vestir; es capaz de bailar, cantar, contar historias sencillas y saltar en un pie.
Cumplimos cinco años contribuyendo al fortalecimiento de campo cultural venezolano, mediante el estímulo de la comunicación, el diálogo y el debate en torno a sus potencialidades en el contexto sudaka y global. Nuestro propósito es crear un espacio donde los artistas e intelectuales nacionales, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, puedan promover su trabajo y comunicar sus intereses, expectativas y dificultades. De este modo, buscamos establecer puntos de contacto, articulación y líneas comunes para la creación, la reflexión y el debate.
Por eso queremos agradecer a nuestros colaboradores, columnistas y amigos por su confianza, tanto como a ustedes lectores por su entusiasmo y apoyo. Su trabajo y recepción nos impulsan a seguir adelante.
Un cumpleaños es siempre una cosa pública, y en este no podemos dejar de referirnos a la situación nacional en tanto que es el sustrato de nuestra praxis.
Como hemos dicho en otras oportunidades, partimos de la idea de que un campo cultural está configurado, en buena medida, por sus confrontaciones, antipatías y desencuentros, lo que no obstante no niega que las desavenencias puedan tomar una forma productiva mediante el diálogo, el debate y la crítica. Pensamos que la condición de toda praxis cultural democrática es que todo el mundo pueda decir lo que piensa y actuar en consecuencia, siempre en el marco de la Constitución. A su vez, nos parece imprescindible que las instituciones cumplan y hagan cumplir la ley, en tanto expresión de la voluntad popular.
Aprovechamos la oportunidad de este aniversario para solidarizarnos con el clamor nacional que no demanda más que transparencia en cuanto a lo sucedido durante la jornada electoral y los resultados del proceso electoral, sea quien sea el ganador. También expresamos nuestra solidaridad con la demanda de respeto a los derechos políticos y humanos de todos los venezolanos, especialmente con la situación de los miles de detenidos, muchos de los cuales no alcanzan la mayoría de edad, así como con sus familias. Nos unimos al clamor por su liberación.
Creemos que la situación exige dejar de lado cualquier conducta o actitud que cause odio y clame por la extinción de cualquiera de las fuerzas políticas en juego. Confiamos en que el pueblo venezolano sabrá exigir a sus dirigentes una conducta cónsona con la peligrosa situación que atraviesa el país.
Además, creemos que para resolver los problemas nacionales mediante el diálogo y la confrontación política no-violenta, es necesario que se levante el bloqueo internacional contra el país, y que los venezolanos nos unamos en torno a dicha causa, que es parte esencial de la defensa de la democracia y la soberanía nacional.
Al respecto de la política cultural, creemos que la situación exige un debate de fondo que tome en cuenta los problemas nacionales, especialmente la desigual distribución de la riqueza que afecta a la gran mayoría de la población. Una política cultural de carácter nacional no puede basarse solo en financiar a determinados actores del campo cultural, bien directa o indirectamente. Si bien esto tiene su importancia, sobre todo si hay criterios racionales que den fundamento a la distribución pública de recursos, lo fundamental es desarrollar una política económica y social que eleve el nivel de vida del pueblo, de tal modo que su existencia no se vea reducida a trabajar para vivir en condiciones menesterosas.
Confiamos en que el campo cultural venezolano puede hacer importantes contribuciones para resolver de forma pacifica, dialogada y fraterna la situación; estamos seguros de que dichas contribuciones son necesarias, razón por la cual, es una gran felicidad para el equipo ser parte de MenteKupa e ir creciendo con ella.