A principios de la década de los sesenta, jóvenes británicos empezaron a escuchar algo distinto a lo que tenía años llegando desde América. La importación del jazz y del folk le cedió lugar a la música de los grandes maestros del delta del Mississippi y de Chicago.

Presentaciones en locales londinenses de blueseros consagrados apurados por problemas económicos, el aumento del intercambio de material discográfico y la presencia de soldados negros en las bases militares estadounidenses en Europa, abrieron las puertas para que se empezara a hacer blues en Inglaterra. Fue así como un blues más blanco, más eléctrico y menos marcado por el sufrimiento de la segregación y el racismo, dio lugar al nacimiento de probablemente las bandas más grandes que el rock recuerde. Haremos una aproximación, a grandes rasgos, de cómo se gestó ese fenómeno y te contaremos sobre algunos de sus máximos exponentes. Y claro que te vamos a recomendar discos, videos y una playlist para ponerte en ambiente.
Los que más saben de la historia del rock dicen que todo lo inventó Muddy Waters, a quien Mick Jagger, Keith Richards, Ronnie Wood, Eric Clapton, Robert Plant y Eric Burdon, entre otros, veían como una auténtica deidad. Dicha deidad sería, en todo caso, el inventor del padre, que en este caso es el blues, porque para los entendidos el abuelo es el jazz y el hijo, que a pesar de los años sigue gozando de buena salud, es el rock and roll.

El jazz y el blues entraron a Europa, pero más precisamente a Inglaterra, por los bares y clubes que abrían sus puertas a los soldados afroamericanos que cumplían misiones en dicho país. Con el andar de la década de los cincuenta, las radios hicieron una gran contribución al difundir lo que se escuchaba en algunos círculos culturales del otro lado del Atlántico. Mientras tanto, en Estados Unidos las estrellas consagradas del blues sobrevivían a duras penas, a causa de productores inescrupulosos, de la segregación y de una cierta etapa de decadencia que experimentaba el género. Cuenta la historia que fue el músico inglés de jazz Chris Barber el primero que llevó a Muddy Waters a Inglaterra, al parecer fue ese suceso el que cambió todo.

Aún con versiones encontradas, muchos concluyen que fue en la gira de 1958, por Inglaterra y Escocia, que Waters con su blues eléctrico terminó de “volar la cabeza” de muchos jóvenes que no estaban acostumbrados a esos sonidos. Luego vinieron John Lee Hooker y B.B. King, entre otros, a terminar de pasar la página del skiffle, que era una forma más rudimentaria y menos eléctrica de interpretar el blues y el folk que llegaban de Estados Unidos y que tenía su espacio en algunos locales nocturnos.
Hay otro detalle, en la banda de jazz de Barber tocaba la guitarra un treintañero nacido en Francia, llamado Alexis Korner,, y nos toca detenernos en este nombre, ya que según Keith Richards se trata de “el padrino del blues británico”. Richards, además, lo describió como un incansable promotor y concitador de talentos.

En 1961 Korner forma con Cyril Davies la banda Blues Incorporated, cuyos discos R&B From The Marquee, de 1962, Red Hot From Alex, de 1964 y Alexis Korner’s Blues Incorporated, de 1965, siguen siendo una referencia del género y de los sonidos de aquella época. Por cierto, ese Marquee Club en el que Korner grabó su disco, fue el primer lugar en el que tocaron en vivo los Rolling Stones, el 12 de julio de 1962. Por lo visto en esos días, y especialmente en ese contexto, todo tenía que ver con todo.

Alexis Korner se dio el lujo de ser amigote y de tocar con Mick Jagger, Keith Richards, Brian Jones, Jack Bruce, Ginger Baker, John Paul Jones, Eric Burdon y Robert Plant, por mencionar unos pocos. Siendo políglota, multinstrumentista, productor musical y cultural, conductor de programas de radio de la BBC, el bueno de Alexis se hizo con un currículum impresionante y con el respeto y el aprecio de todos en el mundo de la música británica de la postguerra; pero no fue la única columna de ese movimiento, pues, para ese entonces, un jovencísimo John Mayall también se metió de cuerpo entero en la movida del blues y se dedicó a difundir y preservar la obra de los precursores del género, que a esas alturas ya rozaba los 50 años.

Mayall ha sido también un músico muy prolífico, cuya banda, The Bluesbreakers, tuvo un pico muy alto cuando contaron con la colaboración de un Eric Clapton que llegó huyendo luego de renunciar a The Yardbirds. Fue The Bluesbreakers With Eric Clapton, de 1966, el disco que explotó en popularidad, catapultando a Clapton, que luego formó el legendario power trío Cream. Clapton sería reemplazado por otra gloria de la música británica como es Peter Green, que a su vez fue uno de los fundadores de Fleetwood Mac, otra banda con un catálogo de blues y blues rock sobresaliente.
A partir de esos sucesos, encuentros y desencuentros, separaciones, aventuras, fusiones y proyectos, el movimiento se haría indetenible. Graham Bond, Spencer Davies, Jeff Beck, Eric Burdon con The Animals, los Blues Boys, The Manfred Mann, Ten Years After, Savoy Brown, The Yardbirds Canned Heat y Led Zeppelin, entre muchísimos otros, contribuyeron a lo que pocos años después se conoció como La Invasión Británica, con los Beatles y los Stones a la cabeza.

A pesar de que las diferencias entre las corrientes de Alexis Korner y de John Mayall no eran tan marcadas, y a pesar de que había camaradería y buenas relaciones entre ellos, a Korner se le atribuye un poco la electrificación británica del blues y a Mayall se le atribuye haber seguido la línea más clásica del género. Apenas los ingleses pudieron ir a Estados Unidos a conocer la movida del blues en el lugar de los acontecimientos, algunos optaron por el rock y otros por el roll, como bien explicó Keith Richards en el documental Under The Influence. Unos evidentemente optaron por la versión más negra, fiestera, sentida y nostálgica del blues y otros optaron por darle un toque más rockero, estridente, a veces acompañado por un halo de misticismo y a veces por uno de psicodelia, probablemente como resultado de la experimentación con drogas que para ese momento eran nuevas. Los primeros hicieron migas con las glorias del blues, forjaron amistades que duraron décadas y vieron de primera mano la discriminación que estos sufrían, y los otros se quedaron más con lo estrictamente musical.

Los que optaron por lo primero, constataron la terrible discriminación que sufrían los negros en Estados Unidos, tal y como les pasó a los Stones en el primer viaje que hicieron a ese país. Que sus ídolos tuviesen que ir a baños distintos a los que iban los blancos y que no pudiesen entrar libremente a cualquier bar, fue algo que les impresionó y algo que, en sus palabras, no habían visto hasta ese entonces. Todo esto contado por ellos mismos, ya que ese viaje y lo que dejó fue registrado ampliamente, pues se trataba de la entrada de unos amantes del blues a la tierra prometida.
Lo cierto es que ver con sus propios ojos lo más cercano al contexto que inspiró los versos más tristes del blues, sin duda fue un impacto y un aprendizaje para unos jóvenes que hacían vida en una sociedad que, en comparación, era mucho más tolerante y abierta. A partir de ahí ya nada sería igual, los lazos entre unos y otros no se romperían jamás.

En el mundo de la música siempre alguien se fijó, se inspiró, se motivó y hasta se copió del trabajo de otra persona. Desde que el mundo es mundo el arte ha funcionado de esa manera, pero pocas veces unos le debieron tanto a otros, como les pasó a los británicos con los músicos de blues nacidos en América. Pagaron con creces, eso sí, pues muchas de las grandes bandas de la historia se formaron al ritmo de ese género lleno de melancolía y de una nostalgia de algo que no se llegó a vivir a plenitud.
En todo este proceso fue y sigue siendo clave la generosidad. Fueron generosos los que llevaron el blues a Inglaterra, como los queribles y bonachones Muddy Waters y B.B. King que apadrinaron a unos muchachos inquietos y deslumbrados y han sido generosos y profundamente agradecidos los Stones, Clapton y compañía, al sostener el legado de sus maestros y al recordarlos con la admiración y el siempre presente reconocimiento que, desde luego, se merecen.
Lista de Spotify Blues Británico
Videos Blues Britanico
John Mayall Feat. Eric Clapton & Chris Barber – Hoochie Coochie Man – Liverpool 2003
John Mayall & The Bluesbreakers with Gary Moore – So Many Roads
Fleetwood Mac w. Peter Green – Homework – 1968/12/31 – Paris
Fleetwood Mac Peter Green – Black Magic Woman (Live Boston Tea Party) 1970
Alexis Korner – Slow Down
Blues incorporated – Alexis Lorner and Cyril Davies
Eric Burdon, Stevie Winwood, Long John Baldry, Julie Driscoll and Rod Stewart – I Feel Alright
Alexis Korner – Stormy Monday Blues
Jeff Beck with B.B. King – Key To The Highway
Muddy Waters & The Rolling Stones Live at the Checkerboard Lounge 1981
Since I´ve Been Loving You [HD] Les Zeppelin Madison Square Garden
Buddy guy Ft. Rolling stones – Champagne & Reefer Live!
Hacer una aclaración en cuanto a los géneros
el blues es el padre de el jazz y del rock
El primer blues que se realizó fue cuando llegaron los primeros esclavos a los USA,
ese primer viaje traía en su seno una tristeza total.